sábado, 30 de agosto de 2008

Un territorio puro


Quién tenga que alejarse sufrirá una nostalgia desgarradora de su tierra y de su gente.
En lengua mapuche, el rewe es el espacio resguardado, protegido, sagrado, que se conserva sin ser usado ni transitado; es el equivalente al altar. Suele ser marcado mediante una talla antropomorfa en madera confeccionada sobre un sólo tronco que representa al antepasado.

Es un espacio al aire libre y es ahí donde se celebra la ceremonia religiosa del Nguillatún, Nguellipún, Camaru o Cocamerucun; se han de desarrollar en cada una de las comunidades durando 4 días y 3 noches con una cantidad ordenada de pasos que se han de cumplir estrictamente.

Elementos comunes presentes en todos los Nguillatunes:

- Gente exclusivamente mapuche, perteneciente a la comunidad que efectúa la rogativa y que trabaja mancomunada, ataviada con sus mejores trajes y joyas.

- Nguellipun: Acción de rogar
- Rewe: Altar sagrado, que toma diferentes formas en cada lugar
- Taill: Canto sagrado
- Ramadas en media luna mirando al Este
- Aún: dar vueltas a caballo alrededor de las ramadas
- Pillan Cushe: Autoridad de la rogativa (mujer)
- Sargento: Autoridad de la rogativa (hombre)

- Amu Purrun: filas de a dos tomados de la mano, un grupo de izquierda a derecha y viceersa alrededor del rewe.
- Choique Purrun: danza de cinco bailarines en edades de mayor a menor y se ejecuta delante del rewe.

Las Rogativas se realizan desde diciembre a mayo en fechas determinadas por las Comunidades.
Como toda ceremonia indígena tiene por objeto reforzar la unión del grupo y armonizarlo con su Amor, la tierra.

El cumplimiento de las reglas naturales y sociales asegurará las buenas cosechas y pariciones, lluvias en épocas de sequías, propiciarán lo bueno y auyentarán lo malo.

Para que las cosas buenas sucedan es preciso mantenerse puro, no transgredir las leyes naturales y no ofender a los hermanos.

miércoles, 27 de agosto de 2008

Enseñanzas de los antiguos

Estamos todos reunidos aquí porque la hermandad de la raza nos convoca.

Estamos reunidos y unidos por el afecto como lo están las estrellas y los astros del firmamento.

Esta unión que sentimos es la fuerza de nuestra raza, de nuestra cultura, de nuestra identidad.

Provenimos de una cultura antigua y espléndida que fue inundada por las aguas del deshielo hace 12.950 años. La gente de aquella cultura se dispersó hacia los cuatro rumbos en busca de lugares elevados, en épocas en que las aguas eran aún acechadas por Kai Kai Filú. Entonces encontramos esta cordillera; trepándonos a ella nos salvamos.

Los antepasados de todas las personas que hoy existen vivieron esa catástrofe, pero ellos no tuvieron la prudencia de transmitir sus experiencias de generación en generación, y ahora parecen ignorar su pasado, aunque los recuerdos silenciosos permanecen en su sangre.

Nuestra cultura primaria no habla de dioses, pero si de una reverencia profunda hacia esa Fuerza y ese Poder que hace que el universo se manifieste, y lo ordena armoniosamente. ¿Parece que el orden sabio no existe? No existe para los que insisten en vivir ignorándolo.

Esa Fuerza Superior organiza de tal modo los hechos, que todo tiene que ver con todo, porque nada existe separado.

Aunque no se perciba el movimiento, todo se mueve de manera incesante, cumpliendo un ciclo amplio, una ley inexorable.

Movimiento ordenado y cíclico, e interconexión, son las reglas del acontecer del mundo.

Olvidar la cultura y entregarse al paganismo actual es renegar de la verdad.


lunes, 25 de agosto de 2008

We Tripantu

©Marta Balbi: "Año Nuevo"
El pueblo mapuche vive el tiempo y la historia de forma cíclica: cada año se repite el tiempo. El futuro será la repetición del presente, el cual, a su vez, es repetición del pasado.

La llegada del Año Nuevo se celebra como una reactualización de la cosmogonía: implica el reinicio, la reanudación del tiempo. No indica un año más; indica una nueva oportunidad para hacerlo mejor esta vez.

Ya se han reunido, han afianzado sus vínculos cantando juntos, se han lavado de lo malo del pasado en las aguas del lago, se han disculpado, han hecho su rogativa, entonces están listos para reiniciar el tiempo, en el preciso instante en que el Sol del invierno coincide con la Luna nueva, ya que el suyo es un calendario Lunisolar.

También es lunisolar el calendario maya, el calendario chino, el calendario sumerio y luego babilónico (evidenciado en el 'Mecanismo de Antiquitera', una herramienta astronómica elaborada hace 2.200 años, que permitía predecir los eclipses lunares y solares a través de cálculos matemáticos babilónicos), el calendario egipcio, el calendario awara de las Islas Canarias, el calendario aymara, el calendario hebreo...

Los antepasados




La gente nueva, la gente actual, no sólo es heredera de sus antepasados -a quiénes fue otorgado el territorio por los Dioses- sino que son los antepasados, bajo nueva piel, nuevo aspecto y nuevas circunstancias.

Pero aquellos antiguos, con todo su espíritu, permanecen espectantes e intactos en los volcanes: son los Pillán.
Están ahí para asegurarse de que los nuevos, las 'reencarnaciones' de los que vivieron antes, no se desvíen del propósito de comportarse como guardianes del territorio, de sus bosques y animalitos, de su gente, y de la cultura, que es el alma de la tierra, del paisaje, del lugar.

martes, 19 de agosto de 2008

Correspondencia entre las culturas


La cultura mapuche no se diferencia a las demás culturas del continente en cuanto a sus creencias fundamentales.
Esta homogeneidad de fondo entre las culturas se debe a que éstas no son manifestaciones humanas aisladas ni locales, sino que conforman un intrincado mosaico armónico, en el que cada pueblo ha desarrollado su modo de vida, pertinente con el clima y el paisaje, pero respetuoso de los mismos principios básicos de la Filosofía Perenne.


lunes, 18 de agosto de 2008

Símbolo de la flor del canelo

La flor sagrada representa a la mujer y su poder de dar vida y con ello, la posibilidad de renacer.

El canelo es una magnolia, por lo que comparte la misma textura y valor simbólico que la flor de loto.

Esta flor es sagrada para Indoamérica, Egipto, India, China y sus zonas de influencia.

La flor del loto en la India simboliza divinidad, fertilidad, riqueza, conocimiento e ilustración. Esta asociada con la abundancia, la que provee prosperidad, pureza y generosidad.

Simbolizando pureza, belleza y todo lo que es bueno.

En el brahmanismo representa a la "Madre de la Creación"; hasta Brahma se dice que proviene de la 'flor del loto', con lo cual se dice que "ha nacido".

Es una representación de los atributos de la mujer; símbolo de belleza, inteligencia, misticismo, resistencia; camino de la resurrección.

viernes, 15 de agosto de 2008

Las fuentes de vida y energía mapuche

Dibujo: Las siete fuentes de energía mapuche



El lugar de donde los mapuches se cargan de su Ser esta situado en el llamado Cono Sur de América del Sur.


Las siete fuentes de vida o regiones del WALL MAPU dan lugar a siete modos de ser diferentes, resultado de las energías especiales que los infunden.


Cada uno de estas fuentes de vida y de poder consta a su vez de sus cuatro direcciones geográficas o Meli wixan-mapu. Cada dirección wixan-mapu esta integrado por aylla rewe (ocho departamentos) compuestos por comunidades, conocidas como lof.


Para cada lugar hay un arriba, su cielo; un aquí, su suelo, y un abajo, el subsuelo, cada uno con sus manifestaciones de vida, sus fenómenos geológicos y elementos materiales propios.


Las siete fuentes de vida mapuches son:
- El Este, visto desde el actual territorio chileno,allende la Cordillera. A su gente se la denomina Puelche: Gente del Este.
- El valle central del actual Chile; se reconoce a su gente como Pikunche: Gente del Norte.

- Los fríos del Sur sustentan a los Williche; la Gente del Sur.

- La región del pino pehuén, en la cordillera central argentino-chilena, desde los 900 a los 1.800 m/snm.; su gente es conocida como Pewenche: la Gente que se sustenta del Pehuén (araucaria).

- La costa del Pacífico Sur chileno da de su vida a los Lafkenche: la Gente del Mar.

- El llano de la parte oriental de la Cordillera de Nahuelbuta y tierras bajas aledañas; allí pertenecen los Nagche: Gente de los Llanos.

- Los valles que sustentan a los Wenteche: Gente de los Valles.

jueves, 14 de agosto de 2008

Treng Treng

El relato transmitido en forma oral dice que alguna gente más dispuesta y esforzada llegó a la costa y ascendió la montaña para ponerse a salvo del agua y de las dentelladas de Kai Kai. La montaña era poderosa, fuerte, rugiente; la montaña fue su protección.

Dibujo: Treng Treng - Con la particular participación de Ciruelo Cabral

Antigüedad de la cultura mapuche

Según el historiador Juan Ñanculef Huaiquinao, el pueblo mapuche tiene una antigüedad de 12.465 años, al 2.008.

Para entonces se produjo el ascenso del nivel del mar a causa del deshielo de la última glaciación, conocida como Würm en Europa, y como Wisconsin en América, que marca el final del Pleistoceno y el inicio del Período Holoceno. Las aguas entonces cubrieron las costas, y hasta el continente del que formaban parte las que hoy son islas del Pacífico.


Ellos relatan su episodio de arribo a este nuevo territorio que aún hoy ocupan, en épocas en que aún acechaba los mares el gigante Liopleurodon rossicus -Kai Kai Filú- , carnívoro acuático del tamaño de una ballena, cuyos restos fósiles se exhiben en el Museo Nacional del Comahue (Neuquén-Argentina).


La Nación Mapuche


Como todos los pueblos nativos, el mapuche es tal por la identificación con el territorio que le fue asignado en el reparto de las tierras a la gente.

Un pueblo indígena es un pueblo natural del lugar que ocupa, sobre el que ha modelado todos sus rasgos culturales. El lugar del pueblo mapuche es la Cordillera de los Andes del Sur con sus grandes lagos y sus territorios adyacentes.

La 'etnia' mapuche constituye una Nación ya que tiene lengua, historia, identidad referenciada mediante símbolos, batería de conocimientos, destrezas apropiadas para su territorio, y estilo de vida común.